El accidente que causó la muerte de un ciclista producida por Pablo García hijo del periodista Eduardo Aliverti, puso arriba de la mesa una paradoja que generan bastante frecuentemente gran parte de los periodistas y que hoy se agudiza con las contradicciones de la Lay de Medios. Por otro lado la diferenciación que se promueve oficialmente entre "periodista independiente" y periodista militante", diferenciación que a mi parecer la considero tragirisueña, porque quienes tenemos una larga parte de la vida vivida y hemos estado alguna vez cerca del tema, en mi caso con mis dos hijas mayores amenazadas de muerte en la década del 60-70 por ser corresponsal de la revista cordobesa Aquí y Ahora, sabemos que hablar de periodismo independiente no es facil porque el periodista en estado de dependencia suele tener condicionamientos implícitos o explicitos por parte de sus empleadores que muchas veces los condicionan, pero hablar de "periodista militante" es lisa y llanamente hablar de Goebbels y confundir periodismo con propaganda, tal como ocurrió en la Alemania nazi, es un hecho deleznable.
Días pasados una fotográfa del bisemanario Perfil que montaba guardia en un taxi frente a la casa del periodista Eduardo Aliverti en la búsqueda de poder realizar una toma del hijo del periodista que generó el fatal accidente, fué agredida por el citado periodista y su esposa tratándola de "hija de puta", a lo cual la periodista respondió que era su trabajo.
Porque digo paradoja, porque se me cruzó la tan buscada foto de Cabezas a Yabran, a quien lo siguió por cielo y tierra hasta que en la playa de Pinamar logró tomarle la deseada foto que desgraciadamente le costó la vida . Esto trajo aparejado el suicidio de Yabran y la prisión a su jefe de custodia por considerarlos la justicia culpables del asesinato. En ese momento todos los periodistas, incluido Aliverti, reivindicaron a Cabezas por su trabajo además de homenajearlo anualmente en el recordatorio de su muerte, por su trayectoria periodística y el cumplimiento de su deber. De ninguna manera voy a comparar el "hija de puta" de Aliverti con el asesinato de la gente de Yabrán, pero si somos objetivos, el disparador de ambas acciones es el mismo detonante: la espera y el seguimiento de un periodista gráfico para el logro de una foto.
En el mundo se los conoce con una expresión italiana: "los paparazzi", que quienes tienen memoria recordarán que también en la búsqueda de una foto generaron el contexto para la muerte de Lady Di y hay infinidad de casos de periodistas que se pasan días y días frente a la casa de un funcionario u otra persona en la busqueda de un reportaje o una foto y no pasa nada, sino que se lo pregunten a Corach o a Oyharbide.
Entonces pongamosno de acuerdo de una vez por todas. Si vale montar guardia para la realización de una acción periodística aceptemosla de donde venga y a quien sea, caso contrario, tenemos una Ley de Medios con muchos baches, por lo tanto agreguemosle la prohibición de dicha conducta periodítica así evitamos puteadas injustas y muertes inexplicables a quienes están en la búsqueda de la intención de una foto o una nota periodística.
