En Mar del Plata se espera con mucha ansiedad el atardecer del 9 de enero en el cual se va a presentar un espectáculo de Fuerza Bruta. Habrá fuegos de artificios y como telón de fondo tendremos la imagen de la llegada de la Fragata Libertad rodeada de naves, que en este caso sustituyen a los micros contratados que estacionan en la 9 de Julio cuando hay un acto en Plaza de Mayo, todo esto, después de que el buque escuela se vió envuelto en una circunstancia bochornosa por culpas nuestras y ajenas, de lo cual no tenemos que vanangloriarnos, sino que quizás hubiera sido bueno y prudente enviar a nuestra tan simbólica nave a Río Santiago para su mantenimiento.
También vendrá a la fiesta la Presidente haciendo su arribo en helicóptero, en que otra cosa puede venir, con el fin de imprimirle a dicho evento un sentido épico tal como nos tiene acostumbrado casi diariamente.
Se habla de que irán caceroleros a ver el espectáculo y de paso a rechazarlo. En un clima de distensión veraniega se hace dificil pensar que una respuesta de protesta cacerolera pueda ser exitosa, no creo que nos llevemos una sorpresa al respecto.
No faltará la alocución de la Presidente donde nos explicará que no nos doblegamos y que logramos rescatar heroicamente la nave, como siempre, sin aclarar que seguimos pagando la deuda externa como los mas obedientes y sin explicar qué pagamos cuando pagamos los bonos del PBI atados al dolar que vencen en 1938 y se emitieron en el 2005.
En fin, una rutina mas del "nacionalismo de izquierda", que nos ha llevado a recordar la Vuelta de Obligado como fiesta patria, que en su momento era patrimonio solo de los Rosistas y ahora como gozamos de un gobierno unitario lo festejamos oficialmente por la defensa del puerto de Bs.As contra el de Rosario que en aquel momento fué lo que representó la Vuelta de Obligado, donde coincidió que los barcos que no se dejaron pasar eran ingleses, como podrían haber sido congoleños o de otro país.
A la Fragata todo nuestro respeto y honores como así también a nuestros nuevos egresados guardiamarinas. Al acto, le faltó Fito Paez, verdad?
